Jueves, 19 jul (RV).- Un total de 175 estados de todo el mundo mantienen relaciones
diplomáticas con la Santa Sede. A éstos hay que añadir las Comunidades Europeas y
la Orden de Malta, y dos misiones de carácter especial: la Misión de la Federación
rusa y la Oficina de la Organización para la Liberación de Palestina (OLP). En este
sentido, en cuanto tal, la Santa Sede es una institución que según la ley y la praxis
internacional, tiene una personalidad jurídica que le permite firmar tratados y enviar
y recibir representantes diplomáticos, como las normas jurídicas de un estado.
El
pasado 16 de diciembre de 2006, la Santa Sede estableció relaciones diplomáticas con
la República de Montenegro, a nivel de Nunciatura Apostólica por parte de la Santa
Sede y de Embajada por parte de la República de Montenegro. Siempre en 2006, la Santa
Sede firmó un Acuerdo de Base entre la Santa Sede y Bosnia Herzegovina, con el que
se confirmaron algunos principios y se definieron algunas disposiciones sobre cuestiones
de interés común. Ese mismo año, el 9 de octubre, la Santa Sede procedió al intercambio
de instrumentos de ratificación del Acuerdo, que fue firmado el 29 noviembre de 2005
entre la Santa Sede y Hamburgo para regular las relaciones entre la Iglesia católica
y la llamada Ciudad-Land.
Ya en 2007, uno de los últimos acuerdos firmados
por la Santa Sede fue el que se ratificó en mayo con los Emiratos Árabes Unidos, fruto
del deseo de promover relaciones de mutua amistad y de desarrollar la cooperación
internacional, estableciendo relaciones diplomáticas a nivel de Nunciatura Apostólica
por parte de la Santa Sede y de Embajada por parte de los Emiratos Árabes Unidos,
según lo establecido en la Convención de Viena sobre las Relaciones Diplomáticas del
18 de abril de 1961.
El anuncio se realizó simultáneamente en el Vaticano y
en Abu Dhabi y tiene un valor especial al tratarse de una Federación con siete Emiratos
independientes -Abu Dhabi, Ajman, Dubai, Al-Fujayrah, Ras al-Khaimah, Sharjah e Umm
al-Qaiwain- situados a lo largo de la costa centro-oriental de la península arábica.
La religión de la casi totalidad de los ciudadanos de los Emiratos Árabes Unidos es
el Islam, que es también la religión oficial del estado. Sin embargo, la constitución
instituye la libertad religiosa y los cristianos pueden desarrollar sus actividades
religiosas públicas. Eclesiásticamente, esta nación, forma parte del Vicariato apostólico
de Arabia.
Pero como les señalábamos al inicio de este programa, además de
los casi 200 estados con los que la Santa Sede mantiene relación, hay que sumar su
participación en diferentes Organizaciones y Organismos intergubernamentales internacionales
como la Agencia Internacional para la Energía Atómica (AIEA) y el Alto Comisionado
de las Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR) de los que es miembro, mientras
que es Observador para la Comisión de Naciones Unidas para el Desarrollo Sostenible,
para el Fondo Internacional para el Desarrollo Agrícola y para la Organización de
las Naciones Unidas, entre otros muchos organismos.
Pero la Santa Sede no se
detiene y sigue trabajando para poder establecer un diálogo cordial con todas las
naciones que permita fomentar el intercambio cultural, el entendimiento y la hermandad
entre todos los pueblos.