Benedicto XVI invita a los laicos católicos de Togo a un compromiso en la vida pública
a través del respeto por la vida, la promoción de la justicia, la defensa de los derechos
humanos y el desarrollo integral del hombre
Viernes, 22 jun (RV).- Benedicto XVI ha recibido esta mañana en audiencia en el Palacio
Apostólico del Vaticano a los obispos de Togo que acaban de completar su quinquenal
visita ad limina. En el discurso que les ha dirigido el Papa, el Pontífice les ha
agradecido “la perseverancia y la valentía” que han demostrado a la hora de afrontar
las numerosas dificultades que ha conocido su país en los últimos años. “En numerosas
ocasiones -les ha dicho- habéis contribuido en el diálogo para la reconciliación nacional,
recordando a todos las exigencias del bien común, en la fidelidad a la verdad de Dios
y del hombre”.
Sin embargo, “la vida eclesial no está exenta de situaciones
preocupantes, -ha afirmado el Papa-, vuestros esfuerzos constantes para reforzar
la unidad de vuestra conferencia episcopal son el signo que demuestra que en todas
las circunstancias, la caridad debe permanecer siempre más fuerte, y que la comunión
visible de los discípulos de Cristo es una realidad esencial que debe ser preservada
para que el testimonio de la Iglesia sea creíble”.
En esta perspectiva, el
Santo Padre ha destacado la necesidad de una auténtica fraternidad entre los obispos
y los sacerdotes. “La plena comunión es indispensable para que sea fructuoso vuestro
ministerio”, ha dicho el Papa quien al mismo tiempo ha hecho un llamamiento para que
todos los sacerdotes de la diócesis de Togo sean fieles a su vocación, en una donación
total a su misión y a la plena comunión con su Obispo.
“Como cuerpo organizado
en el interior de la comunidad y de la Nación, la Iglesia tiene el derecho y el deber
de participar plenamente en la edificación de una sociedad justa y pacífica con todos
los medios que están a su disposición”. En este sentido Benedicto XVI ha agradecido
particularmente el compromiso de la Iglesia de Togo con la protección y el respeto
a la vida y su oposición al aborto.
“La promoción de la verdad y de la divinidad
del matrimonio, así como la preservación de los valores familiares esenciales, deben
estar entre las prioridades de la pastoral familiar, que es un elemento esencial para
la evangelización”. El Pontífice en este sentido ha exhortado a una atenta y especial
formación de las parejas y de las familias. En esta misma perspectiva, Benedicto XVI
ha invitado a proseguir con los esfuerzos para promover las escuelas católicas, “que
son lugares -ha dicho- de educación integral al servicio de las familias y de la transmisión
de la fe”. Para llegar a establecer una sociedad plenamente reconciliada, ha insistido
el Pontífice, “es primordial, partir de nuevo de Cristo, pues solo Él sabe dar, definitivamente,
las medidas de esta gracia a los hombres”.
El Santo Padre ha afirmado que
“frente a los desafíos que el mundo de hoy plantea a la misión evangelizadora de la
Iglesia, la exhortación apostólica Ecclesia in África, representa para vuestras
diócesis una guía preciosa que da la posibilidad de confirmar a vuestros fieles en
la fe y ayudarles a perseverar en la esperanza en Cristo resucitado”.
Hablando
luego, de la inculturación del mensaje evangélico, el Santo Padre ha recordado “realizarlo
en fidelidad a las enseñanzas de la Iglesia, contribuye a enraizar la fe en vuestro
pueblo permitiendo acoger a Jesucristo en todas las dimensiones de su existencia”,
y en ese sentido, el Papa ha dicho que es necesario que los fieles se dejen transformar
por la gracia de Dios.
Finalmente el Santo Padre ha subrayado a los obispo
togoleses la necesidad de proseguir y profundizar en su país las relaciones cordiales
que existen con los musulmanes. “En efecto –ha exhortado- estas buenas relaciones
son indispensables para la concordia y la armonía entre todos los ciudadanos, así
como la promoción de los valores comunes de la humanidad”.