Mons. Foley inaugura la Asamblea Plenaria del Pontificio Consejo para las Comunicaciones
Sociales
Martes, 6 mar (RV).- Con el anhelo de impulsar a los medios de comunicación a ser
«instrumentos de paz, justicia y amor», y de que nuestras vidas sean testimonio de
la «compasión, del perdón y del amor de nuestro Señor y Salvador Jesucristo», el presidente
del Pontificio Consejo para las Comunicaciones Sociales selló su homilía de ayer por
la tarde para dar comienzo a la Asamblea plenaria de este dicasterio.
Tras
recordar la exhortación de Benedicto XVI para que también los medios de comunicación
estén al servicio del amor, de la misericordia y de la compasión de Jesucristo, mons.
John Foley evocó el ruego de san Francisco al Señor: «Haz de mí un instrumento de
tu paz».
Los trabajos, sobre el tema «Las prioridades en las comunicaciones
sociales, para la Iglesia y para nuestro Consejo», se desarrollarán hasta el próximo
viernes en el Aula Vieja del Sínodo, en el Vaticano. Al inaugurar esta Asamblea plenaria
con la celebración de la Santa Misa, mons. Foley hizo hincapié en la importancia de
dar espacio al bien, propagando, por medio de los instrumentos de comunicación, todo
lo bueno que se cumple en el mundo, gracias al «amor misericordioso de Jesucristo»
y en «su nombre».
Ciertamente es necesario identificar los males que aquejan
a la sociedad, poniendo en guardia a las personas contra estos males y difundiendo
la doctrina de la Iglesia católica, que refleja las enseñanzas de Cristo, subrayó
mons. Foley, citando luego algunos temas como el matrimonio y la sexualidad. Pero
también destacó cuán poco se dan a conocer las importantes actividades de la misma
Iglesia al servicio de los necesitados. Como son las numerosas residencias para acoger
a las madres solteras, a los huérfanos y a los enfermos de SIDA, que la Iglesia ofrece
en todo el mundo en nombre de Cristo.
En este contexto, mons. Foley recordó
que se conoce la firme condena de numerosos líderes católicos contra la violencia
y la guerra, pero que, al mismo tiempo, no se da a conocer la importante actividad
de las organizaciones de la Iglesia católica que trabajan sin desmayo, en todo el
mundo al servicio de las víctimas del hambre, de los más pobres y de los marginados.
El
prelado exhortó a utilizar los medios de comunicación para «dar a conocer el mensaje
misericordioso y lleno de Amor de nuestro Salvador», alentando, al mismo tiempo, a
percibirlo en nuestras vidas para testimoniar y comunicar, precisamente, este Amor
que el mundo tanto necesita.
Citando el documento del Pontificio Consejo para
las Comunicaciones Sociales «Pornografía y violencia en los medios de comunicación.
Una respuesta pastoral», que concluye con la exhortación de san Pablo «No te dejes
vencer por el mal; antes bien, vence al mal con el bien» (Rm 12, 21), mons. Foley
señaló que ésta debe ser «nuestra contraseña en nuestro trabajo al servicio de las
comunicaciones».