Ángelus: “La Semana de oración por la Unidad de los Cristianos pone de relieve que
el ecumenismo es una experiencia profunda de diálogo, un escucharse y hablarse, un
conocerse mejor”
Domingo 21 ene (RV).- En su alocución previa al rezo mariano del Ángelus de este tercer
domingo del Tiempo Ordinario, Benedicto XVI ha recordado a los miles de fieles congregados
en la plaza de san Pedro del Vaticano, la importancia de la “Semana de oración por
la Unidad de los Cristianos” que inició el pasado 18 de enero bajo el lema, extraído
del Evangelio de san Marcos: “Hace oír a los sordos, y hablar a los mudos” (Mc 7,37).
Este año el proyecto para esta semana ha sido delineado por los fieles de Umlazi,
en Sudáfrica, una ciudad muy pobre, donde el SIDA ha adquirido proporciones de pandemia
y donde son realmente pocas las esperanzas humanas, como ha recordado el Papa: “Pero
Cristo resucitado es la esperanza de todos. Lo es de forma especial para los cristianos,
herederos de divisiones acaecidas en épocas del pasado. Ellos han querido, en esta
circunstancia, lanzar un llamamiento: Cristo lo puede todo, Él hace oír a los sordos
y hablar a los mudos. Es decir, es capaz de infundir en los cristianos el deseo ardiente
de escuchar al otro, de comunicar con el otro y de hablar el lenguaje del amor recíproco”.
De
este modo, en esta Semana de oración por la Unidad de los Cristianos se pone de relieve,
como ha señalado el Santo Padre, que “el ecumenismo es una experiencia profunda de
diálogo, un escucharse y hablarse, un conocerse mejor. Se trata de una tarea que todos
pueden desarrollar –ha proseguido el Papa- especialmente en lo relacionado con el
ecumenismo espiritual, basado en la oración y el compartir, hasta ahora posible, entre
cristianos”. “Espero –ha señalado el Pontífice- que el anhelo por la unidad, traducido
en oración y colaboración fraterna para aliviar los sufrimientos del hombre, pueda
difundirse cada vez más a nivel de parroquias y de movimientos eclesiásticos, y entre
los Institutos religiosos”.
Con este deseo el Papa Benedicto XVI ha finalizado
su alocución previa al Ángelus no sin antes recordar que el próximo 25 de enero, fiesta
litúrgica de la Conversión de san Pablo, analizará con más profundidad en la Basílica
de san Pablo Extramuros, el contenido del mensaje de la Semana de oración por la Unida
de los Cristianos. “Os espero en tantos en este encuentro litúrgico –ha exhortado
el Pontífice- ya que la unidad se hace sobre todo rezando, y cuanto más coral sea
la oración, más lo agradece el Señor”.
Y tras el rezo mariano del Ángelus y
el responso por los fieles difuntos, el Santo Padre ha saludado, como es tradicional
en varias lenguas. En polaco el Pontífice ha llamado a los fieles a la oración, al
conocimiento recíproco y a la búsqueda común de la verdad, como indicaba el Concilio
Vaticano II e hicieron Pablo VI y Juan Pablo II. En italiano, el Pontífice ha saludado
a los promotores del proyecto “Cambia juego” que invita a los niños a dejar las armas-juguete.
“Me congratulo por esta iniciativa”, ha exhortado el Papa, que ha extendido el llamamiento
exclamando: “¡Preservemos a la infancia del contagio de la violencia!”. Y en español,
éstas fueron las palabras del Santo Padre: “Saludo a los peregrinos
de lengua española. Invocando la protección maternal de la Virgen María, a quien invocamos
como Madre de la Iglesia, os exhorto a rezar especialmente en estos días por la unidad
de todos los discípulos de Cristo. ¡Feliz domingo!”