Festividad de santo Domingo de Guzmán, fundador de la Orden de los Dominicos
Martes, 8 ago (RV).- Se celebra hoy la festividad del santo español santo Domingo
de Guzmán, fundador de la Orden de los Dominicos, también llamada “orden de los Predicadores”.
Santo Domingo nació en Careruela, Burgos, en 1171. De una familia acomodada, sus
padres se encargaron de que desde niño se formara en los más prestigiosos centros
de estudios. A los 14 años, el joven Domingo descubrió su pasión por la teología,
materia a la que se entregó de lleno. Por aquellos años, una gran hambruna sobrevino
a la región de Palencia. El corazón de Domingo no comprendía como a él no le faltaba
nada, mientras otros carecían de lo indispensable, de modo que entregó todo su ajuar
a los pobres.
Un día acudió a él una mujer llorando porque su hermano había
caído prisionero de los moros. A Domingo no le quedaba ya nada que dar más que a si
mismo, decidió venderse como esclavo para rescatar al desgraciado por el cual se le
rogaba. Este hecho conmovió al obispo de Osma, que rogó al joven santo de 24 años
que aceptara en su catedral una canonjía. Un año más tarde fue ordenado sacerdote.
Viajó
junto al obispo de Osma por Francia, Flandes e Inglaterra y fue en estas tierras donde
Domingo quedó profundamente dolorido al ver que había grandes herejías. Empieza para
él una nueva etapa en su vida. Se entrega de lleno a la vida apostólica, viviendo
de limosnas, caminando descalzo y sin más ropa que la puesta. Fundó la “Orden de los
Predicadores”. Los también llamados “dominicos” estaban dispuestos a recorrer pueblos
y ciudades para llevar a todas partes la luz del Evangelio comprendiendo la necesidad
de instruir a aquellas gentes incultas. Uno de estos discípulos se convertiría en
una de las lumbreras más grandes de la Iglesia universal: santo Tomás de Aquino.
La
misión de los “dominicos” encontró grandes dificultades, pero la Virgen vino en su
auxilio. Estando en Fangeaux, una noche de oración, santo Domingo tuvo una revelación
donde, según la tradición, la Virgen le revela el rosario como arma poderosa para
ganar almas. En 1217, el Papa Honorio III aprobó definitivamente la Orden de los
Dominicos. Santo Domingo murió cuatro años más tarde y fue canonizado por Gregorio
IX en 1234.