Ángelus: “La libertad religiosa deriva de la singular dignidad del hombre”

Domingo, 4 dic (RV).- Recordando la celebración, el próximo 8 de diciembre, de la solemnidad de la Inmaculada Concepción, Benedicto XVI ha expresado hoy durante su alocución previa al rezo mariano del Ángelus en la plaza de san Pedro del Vaticano, su deseo de que se respete la libertad religiosa, sobre todo en este tiempo de Adviento en el cual la liturgia se presenta como modelo perfecto de la respuesta del amor de María a Dios. “De hecho, la propia palabra latina ‘adventus’ se refiere a la llegada de Cristo -ha explicado el Papa- poniendo de este modo en primer plano el movimiento de Dios hacia la humanidad, al cual cada uno de nosotros está llamado a responder con la apertura, la espera, la búsqueda y la adhesión”.

De este modo, como Dios se mueve sólo por amor, así el hombre es libre también de amar. Sobre este tema, y en particular sobre la verdad y la libertad, el Concilio Vaticano II dedicó una profunda reflexión, ha señalado el Santo Padre. Y así es, los Padres Conciliares aprobaron hace ya cuarenta años, una Declaración concerniente a la cuestión de la libertad religiosa, es decir, el derecho de las personas y de las comunidades a la libertad social y civil en materia religiosa.

Las primeras palabras que dan título al Documento son “dignitatis humanae”, recordando, como ha señalado Benedicto XVI, que “la libertad religiosa deriva de la singular dignidad del hombre que, entre todas las criaturas de la tierra, es la única capaz de establecer una relación libre y consciente con su Creador”. “Por razón de su dignidad –dice el Concilio- todos los hombres, por ser personas, es decir, dotados de razón y de voluntad libre (…) son impulsados por su propia naturaleza a buscar la verdad, y además tienen la obligación moral de buscarla, sobre todo la que se refiere a la religión” (DH, 2).

De este modo el Vaticano II reafirmaba la doctrina tradicional católica por la que el hombre, en cuanto criatura espiritual, puede conocer la verdad por lo que tiene el deber y el derecho de buscar la verdad en materia religiosa, a fin de que, utilizando los medios adecuados, llegue a formarse prudentemente juicios rectos y verdaderos de conciencia (cfr ivi, 3). “Dicho esto –ha expuesto el Papa- el Concilio insiste ampliamente sobre la libertad religiosa, que tiene que garantizarse tanto a las personas individuales, como a la comunidad, en el respeto de las exigencias legítimas del orden público”.

“Este enseñamiento conciliar, sigue siendo de gran actualidad después de cuarenta años –ha explicado el Santo Padre- De hecho la libertad religiosa está bien lejos de ser asegurada en todas partes: en algunos casos se niega por motivos religiosos o ideológicos; otras veces, aún siendo reconocida de forma escrita, viene obstaculizada por los hechos del poder político o, de forma más solapada, por el predominio cultural del agnosticismo y del relativismo”.

De este modo el Santo Padre ha solicitado una oración para que “cada hombre pueda realizar plenamente la vocación religiosa que lleva inscrita en su propio ser”. Y tras el rezo mariano del Ángelus y el responso por los fieles difuntos, Benedicto XVI ha saludado en varios idiomas, recordando en francés la celebración del próximo 9 de diciembre del día de las personas discapacitadas. “En esta celebración –ha dicho el Papa- invito a cada uno a trabajar siempre en favor de la inserción de las personas discapacitadas en la sociedad, en el mundo del trabajo y también en la comunidad cristiana, recordando que toda vida humana es digna de respeto y debe protegerse a partir de su concepción y hasta su final natural”.

Y tras saludar también en inglés y en alemán a todos los peregrinos, el Papa se ha dirigido en español a todos los presentes en la plaza de san Pedro del Vaticano, estas han sido sus palabras: “Saludo cordialmente a los peregrinos y visitantes de lengua española, de modo particular a los fieles de la Parroquia de San Antonio de Padua, de San Vicente dels Horts, así como a todos los que participan en esta oración mariana a través de la radio y la televisión. Que la contemplación de la figura de Juan el Bautista os anime a “preparar el camino al Señor” con un deseo cada vez más ardiente de salir a su encuentro. ¡Feliz domingo!”.