Visita ad limina de los obispos checos: el Papa subraya la acción de la Iglesia en
el ámbito religioso, “sin invadir de forma alguna la esfera de competencia de la autoridad
civil”
Viernes, 18 nov (RV).- En su audiencia esta mañana a los obispos checos en visita
ad límina, el Papa ha vuelto a insistir en que “la Iglesia no busca privilegios, sino
sólo poder desarrollar su misión”, y cuando le viene reconocido este derecho, toda
la sociedad se beneficia.
En este contexto, Benedicto XVI ha subrayado que
“el Estado no debería tener dificultad para reconocer en la Iglesia a una institución
que no causa perjuicio alguno en sus funciones de servicio al ciudadano. La Iglesia
desarrolla su acción en el ámbito religioso, para consentir a los creyentes que expresen
su fe, sin invadir de forma alguna la esfera de competencia de la autoridad civil”.
Benedicto
XVI ha reafirmado esta mañana el compromiso apostólico de la Iglesia, y su contribución
caritativa, sanitaria y escolar como promoción del progreso de la sociedad en un clima
de gran libertad religiosa. En su audiencia a los obispos checos en visita ad límina,
el Papa ha vuelto a insistir en que “la Iglesia no busca privilegios, sino sólo poder
desarrollar su misión”, y cuando le viene reconocido este derecho toda la sociedad
se beneficia.
El Santo Padre ha analizado en su discurso a los prelados de
la República Checa, los problemas a los que se enfrenta la Iglesia de este país en
la actualidad y que suscitan una comprensible preocupación. Entre ellos el Papa ha
hablado de la escasez de sacerdotes. Un dato que ha inducido a los prelados checos
a dedicar una atención especial a la pastoral vocacional.
Desde este punto
de vista, el Papa señalado el compromiso en la formación de sólidas familias cristianas,
que puede revelarse de gran importancia para la vida de la Iglesia, “porque de la
familia, precisamente, depende la posibilidad de contar con nuevas generaciones sanas
y generosas, sobre las que se pueda proyectar la belleza de una vida totalmente consagrada
a Cristo y a los hermanos”.
Además de la familia, que en el plano natural es
la célula de la sociedad y en el espiritual es la escuela fundamental de formación
cristiana, el Papa ha subrayado la importancia de otros temas, como la inserción de
los laicos en la actividad parroquial y su introducción en una sana y rica vida litúrgica.
Los
obispos checos han expuesto al Santo Padre el creciente número de ciudadanos que actualmente
declaran no pertenecer a iglesia alguna, y al mismo tiempo el interés con el que la
sociedad civil sigue la actividad de la Iglesia católica y sus programas. En este
sentido el Pontífice ha recordado la devastación material y espiritual que el régimen
anterior dejó a los ciudadanos. “Ahora que han reconquistado la plena libertad, el
ansia de recuperar el tiempo perdido y proyectarse hacia adelante, ha podido quizá
restar una atención suficiente a la importancia de los valores espirituales que dan
consistencia a las conquistas civiles y materiales”.