Durante sus vacaciones Benedicto XVI no olvida los sufrimientos de la humanidad, martirizada por el terrorismo, y reza por la paz del mundo

Miércoles, 27 jul (RV).- Benedicto XVI tras unos días de descanso en el Valle italiano de Aosta, mañana se trasladará al palacio apostólico de Castelgandolfo donde permanecerá hasta finales de septiembre. El portavoz Vaticano en unas declaraciones a nuestra emisora nos explicó cómo han transcurrido las jornadas del Pontífice en Les Combes.

El Santo Padre, en su tiempo de vacaciones en Les Combes, ha seguido con atención los terribles atentados terroristas en diversas partes del mundo. En la entrevista el director de la oficina de prensa de la Santa Sede, Joaquín Navarro-Valls ha manifestado que “el Papa a pesar de que esté de vacaciones no da la espalda a la humanidad. Por lo tanto, las víctimas e incluso los terroristas han estado presentes en su pensamiento pero sobre todo en sus oraciones, ya desde la mañana en la celebración de la Santa Misa”. Además “en los dos Ángelus que ha rezado con las personas del valle ha mencionado estos terribles hechos”.

Asimismo, el portavoz del Vaticano ha recordado que la protesta al nuncio en Jerusalén por parte del gobierno israelí, en la que decía que Benedicto XVI no había citado a Israel entre los países víctimas de los actos terroristas, “no tiene fundamento ya que el Obispo de Roma aludió a atentados recientes y no quería hacer un triste repaso de todos los atentados que causan sufrimientos en la humanidad”. El periodo de reposo de Benedicto XVI (en la localidad valdostana de Les Combes), está llegando a su fin. Mañana jueves el Sumo Pontífice dejará el valle italiano de Aosta para dirigirse a la residencia pontificia veraniega de Castel Gandolfo. En estas dos semanas el Santo Padre ha reposado, estudiado y contemplado la belleza de la naturaleza. Así Joaquín Navarro-Valls lo ha confirmado “Su Santidad ha descansado y al mismo tiempo ha trabajado mucho”.

El Doctor Navarro-Valls ha explicado que al inicio de sus vacaciones el Papa tuvo un periodo de adaptación al nuevo clima. No obstante “al segundo día en una conversación con un niño de nueve años se sintió inmerso en la naturaleza y en el lugar. Después de este diálogo Su Santidad expresó que no se imaginaba poder caminar por estos valles con esta privacidad”. Por lo tanto Navarro-Valls ha afirmado que se adaptó rápidamente. El director de la oficina de prensa de la Santa Sede ha señalado que “uno de los momentos más extraordinarios del Santo Padre fue cuando tuvo un encuentro privado con todos los sacerdotes del valle de Aosta en una pequeña Iglesia de Introd; porque los sacerdotes compartieron sus preocupaciones y también sus alegrías en sus ministerios.” Les recordamos que mañana, Benedicto XVI, abandonará el chalet de Les Combes, para trasladarse a Castelgandolfo, cerca de Roma, donde transcurrirá el resto del verano.